Luego de cuatro años, en este mes de octubre se retomó la Experiencia de Vida Rural. El domingo 01 de octubre, el primer grupo, compuesto por jóvenes del tercero medio A, emprendieron viaje hacia el secano costero junto a dos educadores. En sintonía con esta actividad, el viernes 29 de septiembre, en la Capilla Colegial, se realizó una Eucaristía de Envío, en la que participaron estudiantes, educadores y familias.

Durante la misa, que fue presidida por el Padre Arul Dhas, quien estuvo acompañado por el diácono Patricio Blamey, se puso en las manos del Señor, la Buena Madre y San Marcelino, a cada uno de los y las jóvenes que serán parte de este proyecto y a los profesores que los acompañarán. Además, al finalizar, los papás y mamás realizaron el envío de los y las estudiantes, con una emotiva bendición.

Los objetivos de esta iniciativa colegial están vinculados con valorar desde la experiencia de inserción, las dinámicas familiares y laborales de las personas del secano costero; y poner en práctica valores fundamentales, tales como: justicia, equidad, solidaridad, participación y búsqueda del bien común.

De esta manera, durante una semana, son invitados e invitadas a insertarse en las dinámicas familiares y laborales de una familia de las comunas de Litueche, La Estrella, Marchigüe y Pumanque (que previamente han sido contactadas y visitadas por los profesores que participan o han participado de la experiencia en años anteriores).