Agosto y septiembre son meses con una carga emotiva muy especial para nuestra comunidad colegial, ya que recuerdan la partida de dos educadoras, funcionarias, amigas y compañeras muy queridas del Instituto: Sofía Miranda Figueroa (Q.E.P.D.) y Berta Rosales Sandoval (Q.E.P.D.). Como una manera de recordarlas y vivir un momento de oración en su memoria, la tarde de este viernes 28 de agosto, se realizó una liturgia de manera virtual, que fue transmitida por los canales institucionales.

Este momento fue animado por el Diácono Permanente, Patricio Blamey, y educadoras del Colegio. Durante la celebración, la Sra. Susana Urayama, Vicerrectora y Coordinadora de Evangelización Explícita, recordó a ambas funcionarias con emotivas palabras. “Cómo olvidar la inagotable alegría de la Bertita, su espíritu de servicio, siempre atenta a los demás... Sofía, gran profesional, su sonrisa era su característica, irradiaba ternura, su disposición siempre presente…”, señaló.

También, en nombre de la comunidad, les agradeció “su amistad, su cariñosa compañía, por ayudarnos a ser mejores personas, por su fe, por dejarnos un recuerdo tan limpio, por la sonrisa amplia y transparente, por la risa fácil y por su entrega generosa. Estamos ciertas que están gozando en la presencia del Padre Dios”, concluyó.

Recordemos que Sofía ingresó al colegio en 1989, desempeñando labores como secretaria de Rectoría durante sus primeros años, para luego ocupar el cargo de encargada de la Biblioteca Virtual. Sus últimos años en el Colegio los pasó en el Laboratorio de Computación de la Sección Inicial, entregando su cariño y sus conocimientos a los más pequeños.

En tanto, Bertita estuvo 18 años de su vida en la Recepción de la Sección Infantil, recibiendo cada mañana y tarde a los niños, niñas, educadores y apoderados. Siempre con su característica sonrisa a flor de piel, su vitalidad y su positivismo admirable.

Pese al paso del tiempo, y que este año se cumplen seis años de la partida de Sofía y dos de la Bertita, ambas siempre estarán en el corazón de los alumnos, alumnas, educadores y familias que tuvieron la dicha de conocerlas.