- Los alumnos y alumnas de ambos niveles vivieron un momento especial junto a sus educadoras y familias, dando inicio a una nueva etapa en su vida colegial.
Los niños y niñas de los niveles de kínder y segundo básico de la Sección Inicial fueron parte de dos ceremonias muy emotivas, en las cuales cerraron un ciclo de su vida como estudiantes maristas, para comenzar una nueva etapa en el área académica.
Los pequeños de kínder vivieron su ceremonia de paso a primero básico el miércoles 03 de diciembre en el Óvalo. Acompañados de sus educadoras y sus familias, pusieron en manos del Señor este nuevo desafío, ubicándose por curso alrededor de un pequeño altar con un cirio, cuya luz representa el camino que emprende cada alumno.
Una de las educadoras leyó la Parábola del Buen Sembrador, a través de la cual se invita a los niños y niñas a seguir el mensaje de Jesús a ser “buena tierra”, para hacer crecer sus dones y talentos, y a los padres a continuar desempeñando su rol en el camino de formación de sus hijos.
Luego de este momento, junto a sus educadoras visitaron las salas de los primeros básicos, lugar que los acogerán el próximo año.
En tanto, los segundos básicos, que este año dejan la Sección Inicial para pasar a formar parte de Básica en 2015, también se reunieron en el Óvalo, lugar donde el Padre Iván Guajardo bendijo el agua que tenían sus profesores tutores, quienes a la vez procedieron a bendecir a cada uno de sus alumnos y alumnas.
Junto a sus docentes, se dirigieron hasta la Sección Básica, donde conocieron los patios, las salas y los profesores que forman parte de este Ciclo.