Agrupados en dos bloques, un conformado por los 3° y 4° y otro por los 5° y 6°, acudieron la capilla colegial en compañía de sus profesores. El Diacono del colegio, profesor Gonzalo Yavar, pidió a nuestro Señor Jesucristo llenar de energía y paz el alma de estos pequeños alumnos (as) maristas, que inician su proceso de enseñanza en el ciclo, específicamente los 3° básicos que provienen de la sección infantil.

También recordó que estamos en Cuaresma e iniciamos un periodo de reflexión y recogimiento, en donde cada momento de la vida de Jesús será mirado como un ejemplo seguir por todo el mundo cristiano. Durante la liturgia se hizo énfasis en el lema marista “Corazones nuevos para un Mundo Nuevo”, en donde el propósito es convertir esos corazones con un sentido cristiano, siendo buenos compañeros en la sala de clases, manteniendo un buen comportamiento fuera de ella y siendo hijos cariñosos con sus padres y hermanos. Como también se bendijeron las agendas colegiales y las listas de cada curso, con el fin de entregar lo mejor de cada uno de ellos en manos del Señor. La comunidad educativa del colegio quiere que este sentimiento fraterno mueva no solo el alma de los jóvenes, si no que también el de sus familias, ya que ellos también son una pieza fundamental en la formación educativa y valórica de sus hijos.