Los Kinder
recibieron un reconocimiento por el esfuerzo realizado durante
este año, reflejando el esfuerzo colegial y familiar en la
formación de niños y jóvenes como seres positivos.
Un buen estimulo es sinónimo de compañía y reconocimiento. Para
un niño o niña en pleno proceso de formación y crecimiento, es
un gran aliciente que le permitirá afrontar con seguridad las
etapas que vienen, incluyendo aquellas difíciles o sin solución.
Las tías y colaboradoras del Kinder quisieron
testimoniar en estos pequeños sus grandes logros durante este
año académico que finaliza. Para esto, se realizó en cada una de
las salas una sencilla ceremonia con la presencia de los padres
y apoderados, además de amigos e invitados.
El propósito fue reconocer sus trabajos en
relación a una serie de valores que se les inculcan, con el fin
de que entiendan desde temprana edad la importancia de saber
aceptar los éxitos y las caídas.
La amistad, el respeto, la solidaridad, el trabajo en equipo y
la alegría, fueron algunas de las características que se
premiaron en cada sala y que significó una gran alegría en
ellos, junto a sus familias.
En la oportunidad, también se les entregó una evaluación final y
los certificados que acreditan su paso a Primero Básico.