Allí, junto a 25.000 católicos de nuestra diócesis y dirigidos por nuestro Obispo, Monseñor Javier Prado A., celebramos los 75 años de vida de nuestra diócesis y el término de las diversas celebraciones sectoriales del Jubileo del año 2.000. 
80 alumnos de nuestro Colegio participaron en la representación de divesos textos bíblicos.  Para quienes allí estuvimos fue emocionante ver la participación de nuestras familias maristas, en las tribunas, con un lienzo que nos disfinguía y en el desarrollo de la celebración también, pues allí destacan la participación de nuestros alumnos, algunos en el servicio y otros 80 en las representaciones de los momentos bíblicos que se escenificaron.  Así valoramos otra manera de servir a Dios y manifestarle nuestro amor agradecido por la vida que nos da.
Las Familias Maristas de Rancagua y San Fernando presentes en el Congreso Eucarístico Diocesano.
Monseñor Javier Prado saluda a todos los feligreses asistentes al Congreso Diocesano, acompañado por la columna de acólitos. La Cruz de Chile fue llevada por el Diácono Gonzalo Yavar, profesor de nuestro Colegio.  Sin duda que fue una gran experiencia de fe donde culmina un gran año Jubilar dedicado a vivir el perdón, la alegría y el amor centrado en Jesucristo, el Señor de la Historia, de ayer, hoy y siempre. 
Retiro para Matrimonios y apoderados realizado en Pelequén Con gran alegría y profundidad espiritual se vivió en a Casa de Ejercicios de Pelequén, el Segundo Retiro Espiritua para apoderados del Instituto en este año 2.000. El tema central estuvo dedicado a los matrimonios, quienes reflexionaron y proyectaron su vida futura a la luz de la Virgen María, Jesucristo y su evangelio. Estos momentos de profundización espiritual y coloquio matrimonial fueron dirigidos por el diácono díocesano Hernán Gárate, mientras que el sacramento de la reconciliación y la Eucaristía estuvo a cargo del Padre Asesor de la Pastoral de Apoderados del Colegio, Sergio Farías. Sin lugar a dudas que el momento más emocionante y significativo fue el que correspondió a la renovación de los compromisos matrimonia/es, donde
La reflexión estuvo centrada en Jesús y Maria, centro y motivación del matrimonio Marista.  junto con recordar el momento en que los presentes contrajeron el sagrado vínculo, renovaron el compromiso de amor y fidelidad teniendo a Dios como centro y motivo.  Felicitaciones a los matrimonios asistentes y gracias por damos un hermoso testimonio de amor y entrega cristiana a todos los que viven en matrimonio y son padres de hijos que quieren educar en la fe. Mauricio Guzmán Rebolledo  
Asesor Pastoral de Apoderados